Una forma discreta de proteger tu legado y hacer valer tu voluntad: el testamento cerrado.

Hablar de testamentos, más que hablar de finales, es hablar del valor de dejar claridad y tranquilidad a quienes amamos. En Colombia existen diferentes formas de hacerlo, y una de las menos conocidas, pero más interesantes, es el testamento cerrado.

A diferencia del testamento abierto, que se declara o se expresa en voz alta y con completa claridad ante notario y testigos, el testamento cerrado permite mantener tu voluntad en reserva hasta que llegue el momento de ser conocida.

Si eres una persona reservada o simplemente prefieres mantener tus decisiones en privado, este formato puede ser el indicado para ti; porque podrás tener la tranquilidad de hacer conocidos tus deseos sobre tu patrimonio manteniendo tu confidencialidad. 

¿Qué es exactamente un testamento cerrado?

El testamento cerrado es un documento escrito por el testador (quien lo redacta) o por otra persona a su solicitud, que se entrega sellado a un notario y cinco testigos, sin que su contenido sea revelado en ese momento.
El notario solo certifica que el testador le ha entregado el documento, pero no conoce lo que hay dentro.

Esto ofrece dos ventajas principales:

• Garantiza la confidencialidad de tus decisiones.
  
   
• Evita que terceros conozcan el contenido antes de tiempo.
  
   

El texto permanece guardado y solo se abre después del fallecimiento del testador, cuando un juez o notario lo autoriza para su lectura oficial.

Solicita información  sobre cómo incluir a UNICEF en tu testamento cerrado haciendo clic aquí o escribiendo al 322 947 0696.

Es un formato con completa validez legal

Aunque pocas personas lo usan, el testamento cerrado tiene plena validez jurídica en Colombia, siempre que cumpla con ciertos requisitos del Código Civil:

1. El documento debe estar firmado por el testador en todas sus hojas.
   
    
2. Debe entregarse cerrado y sellado ante notario y cinco testigos mayores de edad.
   
    
3. En el acto de entrega, el testador declara que dentro del sobre está su testamento y el notario levanta un acta de otorgamiento.
   
    
4. El sobre se guarda hasta el fallecimiento del testador, momento en que se abre oficialmente.
   
    

El documento debe redactarse con un lenguaje claro que evite ambigüedades.

Diferencia entre testamento cerrado y testamento abierto

Para entender mejor este formato, vale la pena recordar la diferencia con el testamento abierto.

• En el  testamento abierto, el testador expresa su voluntad públicamente ante notario y testigos. Su contenido queda registrado de inmediato en escritura pública.
  
   
• En el testamento cerrado, en cambio, el contenido permanece confidencial hasta después del fallecimiento.

Ambos son válidos ante la ley, pero el cerrado ofrece una opción más reservada y personal, ideal para personas que prefieren mantener en privado el destino de sus bienes y decisiones.

¿Por qué algunas personas eligen el testamento cerrado?

Más allá del aspecto legal, hay razones emocionales y personales que motivan esta elección:

• Privacidad: permite mantener en reserva decisiones familiares o patrimoniales.
  
   
• Autonomía: ayuda a expresar los deseos con claridad, pero sin presiones externas.
  
   
• Seguridad emocional: ayuda a evitar conflictos anticipados entre familiares o beneficiarios.
  
   
• Flexibilidad: puede modificarse en cualquier momento, redactando un nuevo testamento que reemplace al anterior.
  
   

En otras palabras, para muchos adultos mayores, este tipo de testamento es una manera tranquila de organizar su legado sin tener que explicar cada detalle, sabiendo que su voluntad se cumplirá tal como quedó escrita.

Recomendaciones antes de redactar un testamento cerrado

Aunque este tipo de testamento ofrece discreción, también exige precisión en su redacción y rigor en su custodia.

Algunas recomendaciones importantes son:

• Busca orientación legal: Un abogado especializado en derecho sucesorio puede ayudarte a redactar el documento de forma precisa y sin contradicciones.
  
   
• Revisa que esté completo: Todo testamento cerrado debe estar fechado, firmado en cada página y sellado adecuadamente.
  
   
• Evita tachones o enmiendas: Cualquier alteración puede invalidarlo.
  
   
• Confirma la custodia: Asegúrate de que el notario registre el documento y que tus testigos conozcan el procedimiento en caso de fallecimiento.

Un testamento cerrado bien elaborado no solo refleja tu voluntad, sino también tu cuidado por los detalles y tu deseo de dejar todo en orden.

Incluir a UNICEF - Legado Solidario en tu testamento

Así como puedes designar herederos familiares, también puedes incluir una causa que refleje tus valores. El programa Legado Solidario UNICEF te permite destinar parte de tus bienes a favor de los niños y niñas más vulnerables del país, garantizando que lo que lograste construir siga escribiendo una historia más esperanzadora para muchos incluso cuando la tuya haya llegado a su punto final.

En un testamento cerrado, esta voluntad queda consignada de manera privada, pero legalmente válida, siempre que se mencione a UNICEF Colombia – Legado Solidario como beneficiario o legatario.

Tu testamento, más que ser solo un documento patrimonial, puede convertirse en una expresión de amor, propósito y trascendencia.

¿Qué puedes dejar como legado solidario?

Cualquier bien que forme parte de tu patrimonio puede tener un impacto real:

• Un porcentaje de tus ahorros o inversiones.
  
   
• Una propiedad o terreno.
  
   
• Obras de arte, joyas o pertenencias con valor económico.
  
   
• Un CDT, póliza o cuenta bancaria.
  
   

Cada aporte se administra con total transparencia y se traduce en programas de educación, salud, nutrición y protección para la infancia.

Cómo hacerlo paso a paso

1. Habla con tu abogado o notario de confianza: Comenta tu deseo de incluir a UNICEF dentro de tu testamento cerrado. Ellos te guiarán sobre la forma correcta de expresarlo.
   
    
2. Redacta y firma el documento: Puedes hacerlo por tu cuenta o con apoyo legal. Asegúrate de que todo esté firmado y sin errores.
   
    
3. Entrega el testamento en sobre cerrado ante notario y cinco testigos.
   En ese momento, el notario levantará un acta que deja constancia del acto.
   
    
4. Informa a UNICEF sobre tu voluntad.
   Aunque el contenido del testamento no se revele, puedes dejar un aviso confidencial para que la organización conozca tu intención de legado.