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Abuelo feliz y nieto se divierten juntos jugando en casa

Similitudes y diferencias entre niños y adultos

A pesar de la diferencia de edad que pueda existir y que en muchos casos supera los 50 años, entablar una relación entre niños y adultos satisfactoria es muy importante, también porque va más allá de las dinámicas de cuidado.

Importancia de las relaciones intergeneracionales

¿Qué son las relaciones intergeneracionales? Son las dinámicas (conversaciones, vivencias y actividades) que se desarrollan entre personas que pertenecen a grupos de edad o generaciones diferentes, por ejemplo,  los vínculos entre abuelos y nietos.

Pero ¿qué pueden compartir dos personas de distinta edad si existe una gran diferencia entre el cerebro de un niño y un adulto? La espontaneidad es una de ellas, ya que los niños y los adultos de cierta edad suelen ser más abiertos a expresar sus opiniones y no sienten pena al hablar o interactuar. No se trata de imprudencia ni de mala educación, solo es una actitud más tranquila y abierta hacia la vida. 

Es por eso que los abuelos pueden contagiarse de la vitalidad de los nietos y dejarse llevar por su enorme imaginación y pasar el día cantando y bailando, actividades que no se habrían atrevido a practicar en otro momento de su vida por miedo al qué dirán.

Nieta disfrazada de hada y abuelo de rey se divierten actuando juntos en casa
Crédito: Roman Samborskyi

Actividades para niños y adultos

Ahora existen varias actividades que puedes realizar con los niños y niñas de tu círculo social y que te darán una inyección de energía que a niveles físicos y emocionales, tienen un efecto muy positivo.

Al compartir con ellos, puedes sacar a flote ese niño o niña que llevas en tu interior y descubrir que en realidad no hay tantas diferencias. ¿Qué puedes hacer? 

1. Conocer el árbol genealógico: 

Si en tu familia ya hay hijos o nietos entonces ¿por dónde empezar a conocer la historia familiar? Pueden hojear álbumes de fotos y contar historias divertidas para traer a la mente recuerdos que permitan conocer la vida de todos aquellos que ya no están.

2. Jugar y divertirse lejos de las pantallas:

Aunque los más jóvenes pueden enseñarte a usar más fácilmente las nuevas tecnologías, ¿qué tal si tú les enseñas a divertirse de manera simple y creativa? Juegos como la golosa, las escondidas, los ponchados, las piquis o, incluso, enseñarles los juegos con los que te divertías antes, no requieren ninguna pantalla y aseguran la diversión de todos con muy poco presupuesto.

3. Explorar la naturaleza y sembrar:

Abuelo dando a su nieta un paseo en la naturaleza mientras ella tapa sus ojos en un atardecer
Crédito: Halfpoint

Sembrar un árbol es sembrar recuerdos y esperanza en un futuro mejor. ¿Qué tal si sales con los niños y niñas de tu familia al campo o a un parque para conocer la naturaleza y aprender a cuidar la vida? 

Actividades al aire libre como la jardinería o las caminatas ecológicas les permitirán hacer ejercicio y aprender sobre biología y ecología. Pueden empezar por regar las plantas del jardín, plantar un árbol, o incluso plantar frijoles en un algodón.

4. Preparar un rico postre:

Cocinar y hornear con los nietos es un espacio perfecto para compartir recetas familiares y explorar nuevas formas de hacer las cosas. Además, no hay nada más emocionante que comer algo preparado con tus propias manos. 

Puedes encontrar recetas como pasteles, galletas o incluso platos de sal como pastas y arroces. Son muy fáciles de preparar, por lo que todos pueden ayudar a mezclar ingredientes y a medir cantidades.


Sin duda, la desinhibición y despreocupación pueden ser una gran herramienta para establecer un puente entre estas dos generaciones y conectarse con el niño o niña interior. El beneficio de esta interacción no es solo para los adultos. Los niños pueden sacar provecho y fortalecer sus habilidades emocionales y comunicativas al desconectarse del celular y realizar actividades recreativas al aire libre como las mencionadas. 

Lo mejor de todo es que pueden recibir el ejemplo y el consejo de los mayores, con la paciencia y el amor que solo ellos saben dar.

Al inicio de esta publicación nos preguntamos ¿qué pueden compartir dos personas de distinta edad si existe una gran diferencia entre el cerebro de un niño y un adulto? 

Te invitamos a que conectes con tu niño interior, y con ello, que conectes también con aquellos niños y niñas que necesitan de nuestro apoyo. Deja una huella en sus vidas a través de una donación al programa Legado Solidario de UNICEF. Como nos explicó Verónica en esta entrevista, realizar una donación “me permite tener este contacto implícito con los niños y niñas, alimentar a mi niña interior y conectarme con mi chispa divina”. 

Conoce aquí el programa Legado Solidario y haz que los niños y niñas más vulnerables del país puedan acceder a programas de salud, nutrición, agua y educación. Únete a los más de 19.000 legados a nivel mundial, y contribuye al desarrollo social de Colombia.